lunes, 27 de septiembre de 2010

Dreams.


Todo el mundo tiene sueños. Si vives, sueñas; si eres humano, sueñas.
No sé el motivo claro por el que hablo de esto en la entrada de hoy. Tal vez sea al ver frustrado una ilusión, un deseo... O también porque veo más cerca uno de ellos. No estoy segura aunque de todos modos, no importa.
Nadie sabrá de qué estoy hablando y eso que mis metáforas no son del todo complejas. Me parece más complicado un problema de astrofísica que mis palabras. Tampoco quiero subestimaros pero tampoco sobreestimaros. Lo siento, hoy estoy cortante y no me apetece hablar de lo feliz que estoy, porque no estoy de ninguna manera.

Por una parte estoy satisfecha y he de nombrarte de una manera anónima a ti, que de alguna manera has hecho más llevaderos los días aburridos aunque nunca hayas dicho una frase larga. Tú eres mi sueño frustrado. Aunque en parte lo escogí yo, como siempre. Demasiado imbécil como para pensar en mí misma. Duele, duele mucho.

Aquí estoy como siempre, impenetrable de alguna manera muy profunda. Me alegra saber que ya no lloro desde hace más de nueve meses pero también me asusta. Pero esto no viene a cuento, así que me callo.
Pido disculpas porque mis líneas no tengas sentido alguno, pero así me salen sin pensar en mi cabeza.
Volviendo al tema alegre de las ideas, sueños y esperanzas. Quiero dejar claro a todos aquellos ilusos, a los soñadores, que hacen bien al vivir así y me alegra incluirme. Mejor así, con metas, que no con la cruda realidad frente a frente. Porque, queridos lectores, la realidad es muy dura. Pero, ante todo me alegra deciros a todos, que los sueños
se hacen realidad si se luchan por ellos. Si quieres ser un atleta olímpico adelante, esfuérzate y será tuyo.
Todo, se consigue así. Da igual que al principio seamos penosos o no nos apoye nadie. Tiempo al tiempo.
No podeis negarme que alguien nunca a soñado ser algo o tener algo... Porque como dijo William Shakespeare al describir a Julieta:
"Yo soy Julieta y estoy hecha de la misma materia que los sueños"
Y así somos por dentro, un manojo de carne lleno de esperanzas e ilusiones. Quitadnos eso y no seremos nadie.
Así que, para no ser nadie, pelearé por lo que más quiero en este mundo aunque ya te haya perdido a ti.
Porque lo que importa no es lo que hayas dejado atrás, si no todo lo que te queda por conseguir.

2 comentarios:

  1. Nose si la "verdadera realidad" sera tan cruda, pero prefiero conocer la verdad aunque me mate del dolor a vivir feliz por las mentiras. Creo que si la realidad es tan dura la meta tiene que ser el llegar a ser lo suficientemente fuerte para soportarla. Lindo blog, saludos.

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  2. Gracias por el comentario y por leerme! :)
    Tienes razón en parte. La vida ha de soportarse pero también disfrutarla!
    Un abrazo :)

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