martes, 31 de agosto de 2010

My life.


He pensado tantísimas formas de llamarlo que ni siquiera la palabra "mi vida" llenan por completo lo que yo siento. No hablo de todo en general ni tampoco de alguien en concreto y mucho menos os voy a contar mi insignificante vida. No pienso hacer eso. Hoy vengo hablar de a quienes quiero.
Sí, les dediqué la última frase de mi entrada anterior y posiblemente me quedara bonita. Pero yo creo que aún puedo darles más a todos ellos: a mí.
Os doy a mí misma
porque no tengo nada más que pueda ser útil para vosotros o eso es lo que yo creo. Tened presente de que vosotros sois mi razón de existir, cada día... Hagais lo que hagais, siempre os querré y no sabeis cuánto.
Cuando alguien me comentó que le era imposible poner el nombre de una persona en el subnick junto a "toda mi vida" me di cuenta de que tenía razón. Y sí, es imposible porque no es sólo eso. No es sólo una persona, sino muchas más. Y mi vida, me alegra tanto decirlo, sois todos. Por eso mismo no os nombro porque vuestros nombres quedarían escritos en posiciones y yo no quiero que haya escalones ni celos ni nada de esas gilipolleces. Porque es así. Aunque incoscientemente quiera a algunos más y a otros menos, ayude más algunos que a otros. Sé que sin pensarlo, estaría ahí para todos. Siento mucho haber sido tan asquerosamente ñoña pero a veces, es la forma más clara de hablar.
Por eso, como última frase de esta entrada tan repentina quiero decir que:
mi vida sois vosotros
.

domingo, 29 de agosto de 2010

Fine again.


Cuánto me alegra sentir esto al fin. Es un alivio respirar profundamente tras una larga pausa sin tomar aliento. Tras mucho tiempo peleándome con todo para que las cosas se arreglaran, lo han hecho. Sin previo aviso cuando yo ya me había sucumbido a ellas. No de la manera que esperaba. Sólo que cada problema, desembocó en un punto no perfecto pero que me hace feliz saber que existe, que está ahí. Se acabaron las lágrimas, los días amargos, las peleas y el tan familiar sentimiento de culpabilidad.
Ahora ya puedo sonreír sin pensar en cosas malas. Sé que siguen ahí porque siempre han estado pero ya no me preocupan tanto. He aprendido a saber qué pensar y cuándo hacerlo. Y cuando río, pienso en lo que me ha hecho hacerlo y el sonido que sale de mí, es feliz. Porque sencillamente, así me siento en ese preciso momento.
Y no hay nada más hermoso que estar con aquellos a quienes amas, rodeada de mierda, mirando al cielo que por fin es azul; y pensando, y carcajeándose de lo ridícula que puede llegar a ser la vida.

miércoles, 25 de agosto de 2010

Silence.

El presente para mí es silencioso, el futuro incierto y el pasado doloroso. Es como un sueño trágico que transcurre sin una palabra, sin nadie ni nada que haga ruido... Las calles están desiertas y no se oyen las risas de los niños. Hay día y noche pero apenas se nota la diferencia porque la vida es la misma. Noches en vela y días en vela. No hay nada más y eso me enfada tantísimo...
El mundo es grande pero es todo parecido, tan vacío y rutinario. Lleno de corazones rotos y mudos, como el mío, ansiosos porque algo vaya bien o mal con total de salir de esta monotomía tan letal.
¿Por qué nadie dice nada?
¿Por qué no cambian esta normalidad?
Todos, con la boca cosida, incapaces de hablar; callados, sin importarles ya lo que pueda pasar.
Y yo la peor de ellos, llamadme si queréis Miss Nothing, me da igual. Ahogada y sin aire, sin poder respirar... Colgando de un hilo. Muda en el presente, atemorizada por el futuro y asfixiada por los recuerdos. Gran actriz, como siempre, capaz de poner un velo ante el Diablo y llevarse bien con él. No lo hago por placer, es lógico, si no porque es un encargo, un favor, una promesa...
Y esa promesa es una fina cuerda, pequeña y débil que puede lanzarme al vacio. Ya no me importa nada más que eso, saber si se rompe o no.
Ojalá pudiera gritarlo, ojalá dejara de martirizarme la cabeza, ojalá pudiera quitarme la mano de la boca y decirlo bien alto. Pero lo prometido es deuda y no quiero que corten la soga así que...
Shh... Silence.



viernes, 6 de agosto de 2010

Kiita sa remasen koto o itte.


Jinsei wa yōide wa nai mo kantan ni tomodachi o ushinau kotodesu. Anata ni subete o imi madadesuga, unmei no itazura wa, mohaya, sukunakutomo ki ni yūjin. Anata wa, konkai wa setsuzoku shimasen nani mo shite inai. Anata wa subarashii yatta... Subete no ibento o ukeireru. Shikashi, kare wa anata okubyōmono toki ni hito wa okubyōmonona nodesu hito to hi hyōji ni jibun no kao o hyōji shinai to yoba rerute iru. Watashi wa sore o 100 man-kai o ataetaga, kare wa kao ni nani o itte iru yōda. Subete wa umaku watashi-tachi ga issho ni subete no Kameura ga, sonogo, ushiro kara shite iru yōda naifute imasu. Soshite watashi wa dare ga dare o osorete, dare sore ga nisemono tte kotodesu ka. Watashi wa machigatte hitobito ni posutā o kakete, jibun jishin ga fukuma remasu. Te inai koto ga aru akuyaku wa, higai-sha no hitobito-chūdesu. Wareware wa subete no sekinin ga arunode, sore wa usoda. Subete no mondai ni pan-ko o motarasu. Soshite, watashi wa monogoto o kaiketsu suru genzai no hōhō o ukeirete inai. Watashi wa watashi no tame ni, karera wa subete no tomodachida sentaku-ji ni, ikutsu ka no hoka nodeatta shitakunai. Dakara, watashi wa watashi ni ataisurunode, anata wa watashi ni betsu no chiryō ni dōi shinai to iu. Īe, naku, futatabi.
Watashi wa anata matawa dare o kizutsuketa koto wa nai nodakara o sentaku shimasu.